Cuando innovamos en nuestras propuestas para mejorar la experiencia con nuestros usuarios, lo que deseamos es que la parte tecnológica funcione como se espera, que el usuario no sufra problemas técnicos que le molesten y nosotros podamos sentir fiabilidad en la parte técnica.

Asumimos cierto riesgo al proponer algo fuera de nuestra zona de confort y no queremos preocuparnos de las partes del proceso que no dominamos. Para nosotros es fundamental apoyarnos en partners con experiencia que nos hagan el camino lo más fluido posible. Si además, tenemos la capacidad de adaptar la experiencia a la expectativa de nuestra audiencia, el riesgo de equivocarnos prácticamente se disipa.

El Social Live Shopping como nosotros lo entendemos, es una nueva forma gamificada de la experiencia del directo que tiene 3 puntos fundamentales.

Es social:

Habrá usuarios que no necesiten interactuar, pero para otros, poder resolver una duda durante el directo será el paso decisivo a la conversión. La transparencia del diálogo aumenta la credibilidad del discurso y el directo es sincero por naturaleza. El tráfico generado durante el evento te hará captar seguidores en tu comunidad. A nivel técnico existen estrategias para derivar audiencias hacia tu canal de Social Live Shopping y de esta manera atraer al mayor número de personas.

Es directo:

Fresco, natural, desenfadado, somos capaces de hablarle a nuestra audiencia en su idioma. Retenemos mejor su atención porque el Directo tiene ese valor diferencial de saber que el canal es bidireccional, el diálogo de las marcas con sus clientes y la posibilidad de expresarnos en un formato honesto. Para garantizar que la experiencia es satisfactoria, debemos considerar aquellas soluciones que se apoyan en servicios flexibles de demanda como Azure o AWS.

Es gamificado:

Si nuestro usuario quiere, podrá ejecutar la venta desde el directo, pero eso no es todo. Somos capaces de divertirlo, de proporcionarle una experiencia interesante donde además se divertirá. Podremos enseñarle a usar el producto de otras formas, compararlo con otros, asesorar en la compra además de ofrecerle exclusividad durante el evento.

La estrategia de gamificación se podrá adaptar al posicionamiento que requiera el evento. Y esto nos permite alargar el efecto Halo.

Sin duda es una nueva forma para el consumidor de conocer la marca, de ver el producto, es fácil de entender y tiene una componente de honestidad que conecta muy bien con los consumidores más jóvenes. Programado de forma recurrente es una excelente forma de darle a nuestro usuario una píldora de contenido que entretiene, informa y a la vez convierte.